XHERDAN SHAQIRI por @CorderoJavi

XHERDAN SHAQIRI por @CorderoJavi

septiembre 17, 2018 0 Por Esto es Anfield

Xherdan Shaqiri venir a sumar es su máxima.

Por Javier Cordero

El mercado que hace falta para jugar es en el de fichajes hasta la fecha lleva la misma directriz de años anteriores, caracterizado por las contrataciones de jugadores de la década de los 90 sin gran palmares y con proyección de explotar en el momento idóneo de su estado físico (sobre los 25) y táctico (su predisposición a aportar al grupo). En cuanto al perfil de estos ninguno se sale del camino: centrocampistas de recorrido y atacantes de veneno y potencia física. En este último grupo se encuentra el último y flamante fichaje: Xherdan Shaqiri.

El suizo es el prototipo de futbolista diferente. Con la camiseta de la selección helvética no deja dudas de sus capacidades pues a simple cuando toca el balón suceden cosas distintas. La jugada toma un color distinto y la hace mejor en beneficio de los compañeros. Una muestra es su partido del Mundial ante Serbia en el que asumió las responsabilidades de la momentánea derrota y la transformó en una victoria con total merecimiento y convencimiento. Como contraprestación este ritual es más habitual verlo en época de selecciones: Shaqiri le debe al fútbol bastantes más tardes de diversión. Desde que saliera del Basel no ha obtenido una total confianza en su carrera de clubes, relegado al segundo plano – lesiones a parte – tanto en Múnich como en Milán. Tampoco ha sido fácil llegar a Stoke, un proyecto que parecía ambicioso e incluso dado a luchar por Europa y ha terminado de manera catastrófica con el descenso a la Championship.

Esta serie de circunstancias en su carrera son un escollo para confiar en su rendimiento pero su buen papel en Rusia y el precio desembolsado le convierten en una apuesta que merece la pena realizar: el riesgo es más que asumible. Otra cosa es saber su posible papel y trascendencia dentro de la plantilla.

Como sabemos el prototipo físico de Shaqiri encaja al 100 % con el modo de jugar de este Liverpool en particular y de la Premier en general. Su musculatura es portentosa, tiene unas piernas muy potentes y una percha de culturista. Unos 170 centímetros muy preparados para chocar y acelerar de forma explosiva y que repercuten positivamente en su fútbol sin desligarse de la precisión con la que actúa pues Xherdan comprende el juego de forma diferente a la de sus competidores en el puesto como expondremos a continuación.

A diferencia de todos los atacantes con asterisco sobre Roberto Firmino, Shaqiri fluye a través de su intelecto. Su valor no se mide por mera agresividad o por la frecuencia con la que trata de dañar sino por ser un jugador cerebral en sus acciones. Como el ataque de una serpiente, analiza los porqués, cuándo y cómo intervenir según el momento dado antes de hincar el diente lo que tendrá un gran valor en determinados escenarios. Para empezar destaca la movilidad que pone de manifiesto para recibir sin marca a partir de abandonar la banda derecha -su posición de partida- y participar en zonas más interiores. Shaqiri es un mediapunta zurdo que suele partir a pie cambiado y que si tiene un hábitat confortable interviene mucho en el juego y genera bastantes ventajas en un gran rango de acción. Esto casa muy bien con esa flexibilidad posicional que tiene el Liverpool en los jugadores que se encuentran por delante de balón, existe una agitación continua que le beneficia para visitar otras zonas y abandonar la suya para que otro compañero la ocupe.

KALININGRAD, RUSSIA – JUNE 22: Xherdan Shaqiri of Switzerland celebrates following his sides victory in the 2018 FIFA World Cup Russia group E match between Serbia and Switzerland at Kaliningrad Stadium on June 22, 2018 in Kaliningrad, Russia. (Photo by Clive Rose/Getty Images)

Con el balón en los pies su tendencia es distinta a los otros atacantes pues su preferencia es el pase corto, asociaciones y paredes que favorecen el ataque a espaldas del rival. Tiene un gran sentido para atraer/fijar la presión hacia sí y una vez lo hace, suelta el balón y ofrece al receptor una ventaja mayor. Su pierna izquierda es precisa conduciendo y pasando sobretodo en distancias donde debe ser más explosivo, es decir jugando con los cercanos con esfuerzos intensos de muy leve duración. Para culminar, el toque decisivo debe ser un aspecto mucho más explotado por su parte ya que las cifras que ha presentado durante sus carreras no son especialmente destacadas.

El fichaje de Shaqiri es una apuesta que debía realizar en cuanto a diversos factores como precio, estado de su carrera deportiva y esperanzas por el Mundial mostrado. Un recurso de plantilla que supone una buena alternativa entrando desde el banquillo y que aportará ciertos matices a la idea del Liverpool, sin ir más lejos un plus en el enfrentanmiento ante rivales fuertemente replegados sin perder esa pizca de colmillo necesario para la identidad de este club.