Souness «Si fueras a salir una noche, Michael sería el primero al que invitarías. Un hombre encantador»

Graeme Souness hablado esta mañana para SkySports del que fuera su compañero en el Liverpool, en aquella temporada del triplete con la guinda de la Copa de Europa de 1984 en Roma, aquella que Michael casí se olvida en el aeropuerto, pero era algo más que su compañero, era su amigo.

Souness recordó tantos buenos momentos al lado del carismático Robinson «Michael era un gran amigo mío. Tengo tantos buenos recuerdos de haber estado en su compañía. Si fueras a salir una noche, Michael sería el primero al que invitarías. Un hombre encantador, grandes historias, podría contar grandes historias.

Estoy muy triste por Chris y sus hijos. Sé que lleva años luchando contra esto y que le ha resultado difícil. Hace poco se mudó de Madrid a Marbella.»

No estuvo mucho tiempo en el Liverpool, pero lo que estuvo le hizo tener lazos increíbles con Souey y con todos los jugadores del Liverpool «Cuando miras su carrera, era un muy buen futbolista. Disfrutó de un año en el Liverpool – tuvimos un año de gloria y él fue una gran parte de eso – y luego se fue a España y se creó una vida para sí mismo en Osasuna. Luego tuvo una carrera en los medios de comunicación allí y fue muy popular en España.

Era un buen, buen hombre. Mi amistad comenzó con él en Liverpool y solíamos ir a cenar al Top Hat un jueves, su esposa y mi esposa y luego, obviamente, nos convertimos en grandes amigos en Liverpool. Kenny Daglish no estaba de viaje, recuerdo que fuimos a Israel y me alojé con él, y fuimos a otros lugares también cuando Kenny se lesionó.»

Souness recordó una gran anécdota en uno de sus viajes a Madrid, en la que el escocés coincidió con un mítico del golf mundial, Severiano Ballesteros «Puedo recordar que me llamó por teléfono un viernes por la tarde. Solía ir a esos largos almuerzos españoles y estaba celebrando, volvió a su oficina porque había salido a almorzar con Seve Ballesteros .

Estaba caminando por la calle en Madrid y media docena de personas le pidieron su autógrafo y sólo una le pidió a Sevi, así que se alegró de ello.»

Souness ha intentado contactar con Michael Robinson desde el momento que se producía la noticia del cáncer y su lucha «Es un día triste para mí. He tratado de llamarlo un par de veces en las últimas semanas. Michael es un hombre muy sentimental y ya no me cogía el teléfono.

Pensé: «Voy a intentarlo y a probarlo hasta que conteste». Luego pensé: ‘No le llamaré ahora porque puede que esté en la cama acostándose temprano’.

Iba a llamarlo hoy y no he tenido la oportunidad de hablar con él.»

Souness quiso analizar lo que era Michael Robinson como delantero «Era una especie de anticuado centro delantero. Todavía podía correr, cubrir el suelo. Era un jugador inteligente. No era el más rápido, pero eso no le impedía ser una verdadera influencia en los juegos. Su toque era bueno.

Tenía lo que todos los delanteros tienen – tenía un ojo para el gol. Era un jugador de equipo. No era una superestrella pero nos ayudó en ese año cuando logramos hacer el triple. Jugó un gran papel en eso y era bueno en el lugar, era muy popular.

El fútbol es muy importante en todas nuestras vidas, todos lo sabemos, pero cuando esto sucede, cuando alguien se adelanta a su tiempo, el coraje que mostró cuando le diagnosticaron esta terrible enfermedad ha sido tremendo. Era un tipo apropiado y estoy muy orgulloso de llamarlo amigo mío.

No nos hablábamos todas las semanas. Teníamos conversaciones y cuando lo hacíamos, era al final de la tarde cuando él había estado en un largo almuerzo y no podías sacarlo del teléfono.

Pasaba una hora y media al teléfono, mi mujer me hacía muecas y mi teléfono se quedaba sin batería, y yo le decía: ‘Michael, tengo que irme’, y él decía: ‘No, sólo una historia más’, y contaba historia tras historia».

Michael Robinson creo una popularidad increíble cuando llegó a España como delantero primero en el Osasuna y después como comentarista, Souness así lo recuerda porque lo vio de primera persona «En las noches europeas, cuando teníamos la Liga de Campeones, lo veía en España y se había creado un maravilloso hueco en España como comentarista de fútbol.

Le pregunté a alguien una vez, ‘qué lo hace tan popular en España’. Y es la forma en que habla español. Debe haber sido muy atractivo oírlo hablar porque hizo un verdadero éxito de su segunda carrera en España.

Pero mi pensamiento principal ahora mismo es con Chris y sus hijos.» Termino Souness con lagrimas en los ojos, se le fue no sólo su compañero, sino su amigo.